Municipales, sus reglamentos (baños).
¿Viste que todos tenemos algún tic? El mío es mirar como funcionan las cosas y pensar como hacerlas mejor. Confieso que muy bien no me va: Si lo propongo (nunca se a quién), me miran con cara rara o ni me miran. Criticamos lo que está, pero tenemos terror al cambio. No es nada fácil poder proponer en el lugar justo.
Mi espasmo me llevó a escribir muchas propuestas, como la de comunas para todo el país, contabilidades transparentes, un nuevo rol a Internet, etc. Alguien me criticó que se entendían demasiado, que eran obvias y por eso no me daban ni bola. Sí, son sugerencias elementales, pero no tienen repercusión porque no tengo la oportunidad de darlas a conocer. Faltan los mecanismos de canalización de iniciativas ciudadanas.
Una: De tanto esperar a mi esposa yendo a baños públicos desde siempre vi que las mujeres tardan mucho más en el baño de lo que tardamos nosotros. Hasta suele haber “colas”. Las razones son obvias y sin embargo los reglamentos disponen que el espacio destinado a baños deben ser iguales para mujeres que para varones. Tal vez 70 % a 30 % andaría mejor.
Es una muestra evidente que muchas veces hacen mal las cosas, y, de puro acostumbrados, no las advertimos. Años sin que nadie perciba el error . Y así va a seguir a menos que alguien lea esto.
Errores evidentes como ese hay muchos. Creo haber descubierto unos pocos. Espero estar ayudando a solucionarlos. Al menos a discutirlos.
1 comentario:
Me sorprenden tus observaciones. Sin duda en esta está reclaro. Sigo recorriendo tu blog.
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